Criterios a la hora de evaluar

Antes que nada, me parece útil aclarar diferentes situaciones que inciden en el contexto de evaluación:

-        Puesto que la materia puede ser cursada tanto por estudiantes iniciales como por aquellos que estén cursando su especialización en literaturas extranjeras, tenemos en cuenta:
o        Cantidad de materias cursadas/aprobadas por el estudiante
o        Si entre las materias cursadas/aprobadas hay uno o más niveles de teoría literaria
o        Si el estudiante es principiante, pero ha cursado otras carreras o tramos de ellas previamente.

Esto ayuda a comprender algunos de los errores formales o teóricos que puedan cometerse en el desarrollo de la consigna propuesta.

Cuando corregimos, en la cátedra, tenemos en cuenta los siguientes criterios:

-        hipótesis planteada en términos que consientan un desarrollo argumentativo coherente a partir de ella;
-        uso sólido/pertinente/adecuado de los materiales críticos y teóricos trabajados durante la cursada;
-        uno de los textos literarios conformando un corpus a partir del cual extrapolar ejes de análisis pertinentes y que tengan en cuenta los debates que se produjeron a lo largo de la cursada;
-        capacidad de análisis que exceda el recorte de citas;
-        ideas expuestas claramente y buen manejo de la argumentación;
-        excelente ortografía y sintaxis y buena presentación;
-        conocimiento de los recursos de citación y notación académicos.

Siendo el primer parcial, por lo general, presencial y el segundo, domiciliario, siempre hay una base que permita reconocer, en gran medida, si la producción es propia; aunque este es siempre un punto arduo de definir, intentamos formular consignas que eviten la repetición de “fórmulas”.

-        Los programas de las cursadas cambian todos los años, lo cual no admite un “formato tipo” a seguir, ni respuestas de manual; evaluamos la pertinencia interpretativa sobre la base de determinados aportes teóricos seleccionados por la cátedra y los aportes personales que los estudiantes puedan hacer –incluso de lecturas y cursadas previas o de otras materias- que iluminen particularmente las lecturas más recientes.

-        Se reserva siempre parte de una clase para la devolución y la aclaración de las correcciones; en el caso del segundo parcial y aunque ya conozcan los resultados de la evaluación, éste se devuelve en la primera mesa de diciembre, incluso para que los estudiantes puedan despejar dudas en vistas de la preparación del examen final.

-        De lo que hoy tengo en casa va un ejemplo, no sé si muy aclaratorio de la cuestión. Este es el caso de un estudiante con 3 materias, por eso se consideró su bagaje liviano en términos académicos; de haber sido un estudiantes avanzado, la nota era menor.




2 comentarios:

  1. Hola Elina!
    En primer lugar te digo: qué trabajito que tienen para corregir y para armar programas nuevos todos los años!! Los felicito por las consideraciones previas que hacen antes de corregir los exámenes! La verdad que los criterios dan cuenta de una evaluación integral, además de recuperar lo debatido durante la cursada, eso está buenísimo! Ya que se produzcan debates es sumamente enriquecedor!! Eso es más difícil de lograr en materias “duras”, como la matemática :-(
    También me parece muy bueno que le dediquen tiempo a la devolución de las correcciones, ya que muchas veces eso no pasa y los alumnos ni se enteran en qué fallaron.
    Si no fuera porque la literatura no es lo mío, te pediría cursar tu materia! Jaja
    Un beso, Lorena

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  2. Hola, Lorena:
    gracias por el contacto.Como decís, algo agotador cambiar de programa anualmente, pero también es para nosotros una apuesta permanente a la investigación y renovación de lecturas y propuestas. Las palabras y los números construyen mundos e incitan a una imaginación poética y proteica de nuestros universos, seguramente tendrás intervenciones interesantes.
    saludos,
    Elina

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